Descontento generalizado provocó entre la dirigencia política y empresarial de la Costa Caribe la opción que dio la Comisión de Regulación de Gas y Energía, Creg, a la industria de la Región, con contratos a largo plazo, de diferir en dos años y en partes iguales el aumento del 25% en el precio del gas.
El ministro de Minas, Tomás González, dijo que esta fue la “mejor solución” que encontraron para reducir el impacto del incremento.
Explicó que el 85% de la demanda industrial tiene contratos a un año y el 15% a cinco años y que para estos últimos el incremento en los precios del gas será del 25%. Al analizar las salidas legales y regulatorias frente al aumento, el ministro dijo que encontró que los contratos “no pueden ser cambiados unilateralmente”.
La opción viable fue que un acuerdo entre las partes les permitieran diferir el incremento en dos años en partes iguales. Señaló que el compromiso con los contratos a cinco años que dividan el aumento es que no habrá incrementos adicionales en 2016. “Creo que es una situación mucho mejor a la que se estaban enfrentando hace unas semana”, dijo González.
Considera que con esta medida el incremento de los contratos a largo plazo se equipara con los de un año, que está en el orden del 12,5%.
Esta medida quedará contenida en una nueva resolución que la Creg expedirá esta misma semana; incluso podría salir antes de la reunión del viernes en Cartagena con congresistas, industriales y el Ministerio de Comercio.
Destacó González que viene un trabajo conjunto sobre la oferta y la demanda para “seguir mejorando la regulación”, para revisar los ajustes que se requieran a futuro.
Agregó que como ministro está obligado a “proteger la regulación y las reglas de juego de la inversión”. González señaló que para los usuarios residenciales el incremento será de hasta el 8%, pues, como hacen parte de mercado regulado, las mismas normas dan herramientas para manejar los costos.
“Para una factura de gas que en la Costa Caribe está en un promedio de $18.000 el aumento del 8% sería $1.500 para el estrato cuatro y para el estrato uno sería de $600”, dijo el funcionario.
Se hizo un esfuerzo. La ministra de Comercio, Industria y Turismo, Cecilia Álvarez-Correa, indicó que la medida de diferir el incremento fue el resultado de un “gran esfuerzo” y de reuniones de trabajo con los productores.
Dijo que por directriz del presidente Juan Manuel Santos fue conformada una mesa de trabajo con el fin de analizar el tema de competitividad en relación con los costos de energía y gas. Para este fin han diseñado una “hoja de ruta y se incluirá en el Plan de Desarrollo el costo país”.
“Quiero decirles a los industriales costeños que tienen una ministra de la Región que defiende los intereses de la Costa y sé que el ministro de Minas hizo un gran esfuerzo para minimizar el impacto del alza en el costo del gas”, indicó Álvarez-Correa.
No es suficiente. Manuel Vives, subgerente comercial de Gases del Caribe, aseguró que diferir en dos años el incremento del 25% en los precios del gas para la industria de la Costa Caribe “no es suficiente”, pues la Región pagaría el combustible por encima de los precios del resto del país y los internacionales. “El 25% resulta desproporcionado”, dijo el ejecutivo .
Joseph Dacarett, analista económico y empresario, expresó que “la fórmula es perversa y, además, desventajosa en todos los sentidos para la región Caribe frente al resto del país”. Agregó que el aumento en el gas les hará perder a las empresas exportadoras regionales las ganancias del incremento del dólar.
Rosmery Quintero, presidenta de Acopi, dijo que “tener tarifas tan altas para el Caribe, que puede abastecer a otras regiones, indica que hay una injusticia con la Región”.
“Alza del 8% es alta”: alcaldesa
La alcaldesa de Barranquilla, Elsa Noguera, dijo que un alza del 8% en la tarifa residencial del gas en la ciudad es alta y afecta la competitividad. Así lo afirmó tras el anuncio del ministro de Minas y Energía, Tomás González. “Ocho por ciento es más de lo que crece la inflación; es decir es bastante, si bien es mejor a lo que habían propuesto inicialmente, seguimos diciendo que va a afectar de manera fuerte el bolsillo de nuestra gente”, agregó la mandataria. Sostuvo que Barranquilla y la Costa Caribe son productores, no solo de la Región sino del resto del país, por lo tanto no deben tener un alza de esa magnitud porque afecta a los más necesitados. “El alza en el sector industrial es un golpe duro a la competitividad. Un incremento del 25% afecta independientemente que quieran diferirlo en un periodo de tiempo mayor”, agregó Noguera.
Rechazo regional
En desacuerdo se mostraron mandatarios costeños por el aumento de las tarifas del gas en un 8% para el sector residencial y de un 25% para el industrial, el cual será diferido en dos años. En La Guajira, departamento productor de este combustible, el gobernador, José María Ballesteros, consideró que “no es justo que si aquí se produce el gas para casi todo el país, se dé ese incremento”. El alcalde de Riohacha,
Rafael Ceballos, dijo que “esto lesiona la economía de todos los habitantes de la Costa”. El gobernador de Sucre, Julio César Guerra, afirmó que “ningún alza que agrave la situación económica de pobreza en el caribe colombiano es conveniente”. El alcalde de Valledupar, Fredys Socarrás, insistió en que “esto afecta la competitividad y la productividad”.
